Ciudad de México.- De las críticas a las encuestas “copeteadas” en 2012, a la cordialidad y la confianza en 2018, así la transición “pactada” de Andrés Manuel López Obrador como candidato en diferentes procesos, a virtual ganador de la Presidencia.
Tras la elección del domingo, Andrés Manuel López Obrador se reunió ayer con el presidente Enrique Peña en Palacio Nacional y sostuvo que acordó trabajar de forma ordenada en la transición.
El morenista describió algunos de los temas que abordaron e incluso a los acuerdos que llegaron, como su participación en la reunión de mandatarios de la Alianza del Pacífico, en Puerto Vallarta, en tres semanas, y comenzar a trabajar el presupuesto de 2019, una vez que sea confirmado su triunfo por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Para el tabasqueño “fue un encuentro cordial, amistoso, importante”, donde se abordaron temas de la transición, el primero fue esperar la declaración de Presidente electo, una vez que se validen los resultados de la elección para comenzar el proceso de transición.
“En todo este periodo tenemos que ponernos de acuerdo en todos estos temas, que la transición se dé de manera ordenada, pacífica, que no haya sobresaltos, que haya confianza en temas económicos, financieros, con el compromiso de que vamos a ser respetuosos de la autonomía del Banco de México.
“No va a haber injerencia en temas financieros en lo que respecta al intercambio monetario, lo que tiene que ver con la paridad del peso con el dólar, temas que, repito, corresponden al Banco de México: autonomía, equilibrio macroeconómico y que continúen los programas en proceso, que no se detenga ninguna actividad”, dijo.
El abanderado presidencial de la coalición Juntos Haremos Historia agradeció al presidente Peña por actuar de manera respetuosa durante el proceso electoral.
“Me consta que cuando un Presidente interviene en las elecciones no hay una auténtica, una verdadera democracia”, dijo
