Las autoridades de inmigración de Estados Unidos rechazan la gran mayoría de las solicitudes de asilo de los migrantes centroamericanos, así como de otros países de Sudamérica, a quienes después de la cita de entrevista les niega el asilo y los envían a centros de detención de Texas, donde los concentran y recluyen hasta más de dos meses para luego deportarlos a sus países de origen, dio a conocer Juan Antonio Sierra Vargas.
El coordinador de la Pastoral de Movilidad Humana de la Diócesis de Matamoros en el Módulo del Migrante de la central de autobuses, en donde llegan a atender y apoyar a miles de indocumentados al mes, precisó que mantienen contacto con los migrantes desde que llegan a esta ciudad para solicitar asilo, hasta después de la cita, por lo que pueden enterarse si les otorgan el asilo o se los niegan.
No vienen preparados
Sierra Vargas precisó que a la mayoría les niegan el asilo político porque no vienen preparados y no cumplen con los requisitos para que se les otorgue, mientras que a quienes sí se les concede, tienen que pagar una fianza de hasta 5 mil dólares para salir de los centros de detención y puedan ir a reunirse con sus familiares que permanecen de manera legal en ese país.
“Lo que sí sabemos es que a mucha gente la entrevistan, los llevan a los centros de detención, que son variables: Reynoldsville, Kingsville, San Antonio, en la Isla del Padre, en McAllen, hay como siete centros aquí en el Valle; los llevan ahí, los tienen como dos a tres meses para ver su situación, les piden una fianza de 5 mil dólares, algunas veces no es muy elevada, y hay quienes no tienen los recursos ni su familia tampoco”, dijo Sierra Vargas.
Destacó que después de que los tienen ahí recluidos, “juntan a un número bastante grande, los llevan a Louisiana, los concentran, después ya juntan un grupo para un avión grande y los llevan a cada país a quienes no les dan asilo, que son la gran mayoría”.
Cada mes llegan más para una cita
Especificó que desde hace casi un año llegan con regularidad y de manera constante, cada mes, familias y grupos reducidos de migrantes centroamericanos, cubanos y venezolanos en su mayoría, para solicitar asilo, a quienes atienden en la Casa del Migrante, y muchos esperan el día de su cita en campamentos a pocos metros de las casetas de peaje en los puentes internacionales.
Sierra Vargas comentó que, por lo que cuentan los migrantes que acuden a entrevista de asilo, tienen comprobado que a quienes llegan en caravanas hasta las ciudades fronterizas de México, a todos ellos les niegan la solicitud de asilo después de una rigurosa entrevista e interrogatorio.
Desde mayo del año pasado más de mil centroamericanos solicitaron asilo en Estados Unidos; solo en el periodo que comprende de mayo de 2018 a agosto de ese mismo año más de 850 migrantes solicitaron asilo en el Puente Nuevo Internacional, en donde cada semana se apuntan más migrantes para pasar a una cita y entrevista con la esperanza de que se les otorgue el asilo
