29/01/2019 – Alrededor de 38 mil empleos están en riesgo de perderse en caso de que no se concreten las negociaciones para abastecer las centrales carboeléctricas de la Comisión Federal de Electricidad luego de la suspensión en la compra de carbón en la región Carbonífera de Coahuila.
Antonio Guerra Flores, empresario minero de Nueva Rosita, señaló que prevalece la incertidumbre ya que la producción de carbón es la principal actividad económica de la zona y aseguró que el 80 por ciento de los productores iniciaron recortes de personal para poder costear las nóminas.
Y es que desde diciembre del año pasado cuando se suspendió la compra del carbón por parte de la CFE comenzaron los problemas, generando pérdidas millonarias; los municipios de Múzquiz, Sabinas, Progreso y Juárez, son los que más han padecido por este problema que a consideración del empresario impactará a otros sectores de la economía como las pequeñas y medianas empresas.
Asimismo, compartió que algunas minas como las suyas, trabajan al 50 por ciento de su capacidad como medida preventiva para no parar labores por completo o tener que despedir de manera definitiva al personal ya que tras el recorte, se quedaron únicamente 600 empleados
